Cuando ya nos hemos decantado por la adquisición de un vehículo mediante un contrato de renting, nos vemos en la incertidumbre de elegir entre las distintas modalidades que existen. Pero ¿qué diferencia hay entre los distintos tipos de renting?
1. ¿Cuáles son los tipos de renting que se ofrecen?
2. ¿Cuál es la diferencia entre un renting fijo y un renting flexible?
3. Antes de decidir es importante hacer un estudio
Ya sabemos en qué consiste un renting, pero ahora nos vemos en la disyuntiva de decidir cuál es el más apropiado para nuestro bolsillo y necesidades.
Para ello, es fundamental conocer las variantes de renting que tienen algunas entidades financieras para ofrecer a sus clientes.
En general, los tipos de contratos pueden ser: renting fijo o renting flexible.
También, dependiendo de la empresa de renting, pueden ofrecer contratos más adaptados a las situaciones particulares de las empresas con contratos más ajustados
El renting fijo consiste en un alquiler del vehículo a largo plazo, entre 48 y 60 meses, donde se establecen todos los servicios necesarios y los kilómetros anuales a realizar. Es conveniente para aquellos usuarios que saben exactamente la movilidad que necesitarán durante el período de arrendamiento.
La cuota se establecerá en base al valor del modelo del vehículo, los kilometrajes pactados, los servicios incluidos y el plazo del contrato.
Por ello, al momento de la contratación se debe tener una idea clara de las necesidades ya que, por ejemplo, un exceso de kilometraje al establecido puede originar una penalización económica.
Como su nombre lo indica, el renting flexible es ideal para aquellos usuarios o empresas que no pueden determinar exactamente las necesidades de movilidad ni el tiempo de uso.
Ante esta circunstancia el renting flexible facilita ajustar la cuota a esas variables y permite la cancelación anticipada sin penalizaciones en caso de que deba prescindir del vehículo o ya no lo necesite.
Además, esta flexibilidad permite cambiar de vehículo si necesitas más prestaciones o quieres un vehículo más nuevo o de mayor tamaño.
Algunas empresas de renting ofrecen contratos de renting más adaptados a las necesidades de la empresa con amplias flotas de vehículos.
En estos planes pueden incluir servicios como gestión de flotas y tarjetas de combustible, entre otros. También pueden adaptar los plazo a corto o largo plazo según la necesidad de la empresa.
El coste fijo mensual de la cuota de un renting fijo es previsible mientras que en el flexible puede suceder que se excedan los kilometrajes anuales y ello implique una penalización, por ejemplo, pagando una cuota más.
En el renting fijo la cuota es más económica y competitiva ya que los gastos están previamente establecidos, mientras que en el renting flexible la cuota mensual es variable y suele ser más alta.
Otra diferencia es que finalizado el contrato de renting fijo no se puede cancelar e incumplirlo está penalizado económicamente. Mientras que el renting flexible permite la cancelación contractual en caso de ser necesario.
Las prestaciones de servicios básicamente son iguales en ambas modalidades de renting. Para encontrar la oferta más beneficiosa dependerá de la compañía de renting. Con ellas podrás negociar incluir el cambio de neumáticos, el vehículo de sustitución en caso de reparación de averías, etc.
Para autónomos y empresas el renting, cualquiera se la modalidad, goza de ventajas fiscales.
Es importante claras las necesidades de servicios que requieres para tu vehículo, el tiempo que lo necesitarás y los km/año que crees que te bastarán antes de formalizar un contrato de renting. Estos datos determinarán cuál es la mejor opción para ti.
Así, por ejemplo, el renting fijo es la modalidad más recomendable para negocios estables, en los que no debes preocuparte por gastos imprevistos y que el largo plazo no implique un problema.
En cambio, el renting flexible suele ser mejor para un negocio fluctuante ya que puede cancelar el contrato o, también, para empresas que requieran más flota en determinados períodos del año.
Otro caso en donde el renting flexible resulta más recomendable es para aquellas empresas o autónomos que tengan dificultades para acceder a financiamiento y necesiten incorporar vehículos a corto o medio plazo, o que tengan proyectos por períodos de tiempo determinados o que puedan ser cancelados, o con volumen de negocios variables y que requieran reducir o aumentar la flota.
Por ello, es fundamental un buen asesoramiento por parte de la entidad financiera de renting de vehículos. Ellos podrán hacer un estudio de tu caso y recomendarte la mejor solución para ti o tu empresa.
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